Más de 78 mil personas pudieron disfrutar la gran final del Mundial en el estadio Olímpico Luzhniki de Moscú. Pero como es de costumbre la FIFA organizó una fiesta previa en la que tuvo mucho colorido, mucha música y que al igual que en el acto inaugural todo fue impecablemente coordinado.
Con una duración de aproximadamente quince minutos, alrededor de 800 personas deleitaron al público que estaba en Moscú como a todo el mundo que vio a través de su televisor con un espectacular acto de clausura donde participaron artistas como Will Smith, Nicky Jam, Era Istrefi, quienes interpretaron el oficial de la himno Copa del Mundo, ‘Live It Up’.
Pero la cereza de la torta la puso nada más y nada menos que la sonrisa del fútbol, Ronaldinho, quien apareció sobre el césped del estadio tocando un tambor tipo yembe con el que acompañó a la cantante Aida Garifullina en la interpretación de la tradicional canción rusa Kalinka.