#21
July 24, 2018
Europa gana en todo
Terminó el mundial de Rusia 2018. Se cerró el telón de un evento fascinante. Bien estructurado y organizado, con logística de primera, sin errores visibles para nosotros los periodistas acreditados por la FIFA.
Hubo un paréntesis puntual y fue el idioma. Nada más. Esto por qué en Rusia hablan en ruso y ya, no hay inglés ni francés. Un simple detalle, solucionado consecuentemente, porque en la Rusia donde solo hablan en ruso, la gente se dejaba entender por señas o por el traductor de google que cargaban en el teléfono móvil, desechando esa imagen que nos llevaban a la predisposición del tipo poco hablador y distante de la amabilidad. Realmente fue un “mundialazo” en todos los aspectos.
Les reconozco que desde niño, cuando se juegan los mundiales y creo que por una inducción familiar, con la camiseta de Venezuela puesta, apoyaba a todas las selecciones sudamericanas participantes. Celebro los goles, los sufro.
Hoy, después de llegar del mundial, puedo confirmarles que mis argumentos siguen estando vigentes. En nuestra confederación hay cinco cupos y habitan tres campeones del mundo, es la eliminatoria más complicada del planeta, pero de ahí a estar en la elite, hay un trecho largo para el análisis en la actualidad.
Hay un cuestionamiento que suscribe lo que tanto tiempo se ha crucificado, eso que ahora empieza a alumbrar y tiene que ver con el poder de la táctica sobre el talento. Europa nos ha desnudado. A nosotros los sudamericanos que históricamente nos sacaron todo, que nuestras ligas son el vivero de las suyas, ahora en el fútbol de selecciones también encontraron su margen para marcar distancia.
Ya no basta con el talento individual y el temperamento aguerrido que tanto tiempo nos caracterizó. Los europeos encontraron eso y le sumaron el orden posicional (muchas veces impecable), así como la jerarquía en el sufrimiento para sostener un resultado, algo de alta valía en la actualidad.
Se confirmó la idea de tener una columna vertebral firme, así como lo mostró Francia: Arquero sólido, zagueros rápidos y con buen juego aéreo en las dos áreas. Volantes centrales uno de quite uno con salida limpia, una media punta con agresividad y un nueve sólido. Nada más. Europa está encontrando argumentos que nosotros estamos perdiendo. No solo es calidad, es oficio. Por eso y más, ya también aprendía a festejar de buen juego de los europeos así como descubrí la amabilidad de idiosincrasia rusa.
Autor: Walter Reinaldo Roque
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