La crisis política social desarrollada el 2019 afectó a todos los sectores de la sociedad boliviana. El fútbol no fue ajeno a esta situación. Han sido un total de 36 los días en los que el torneo de la División Profesional del Fútbol Boliviano estuvo sin jugarse. ¿Es esta la crisis política y social que más afectó al desarrollo del fútbol profesional en Bolivia?
El 1ro de noviembre de 1979, Alberto Natusch Busch consuma el golpe de estado en contra del presidente civil Walter Guevara Arce. En esa ocasión el torneo de la Liga Profesional del Fútbol Boliviano estuvo parado solamente 14 días. Recordemos que un golpe de estado militar supone medidas extraordinarias como el toque de queda y la militarización de las calles.
Unos años más tarde, en el golpe de estado militar desarrollado por Luis García Mesa, la Liga Profesional de Fútbol Boliviano tuvo un parate de 12 días. Los horarios de los partidos tenían que ser ajustados al del toque de queda, lo que suponía un peligro para los aficionados que retornaban a sus casas.
En octubre del 2003, cuando el paro encabezado por Evo Morales tenía en vilo al país, el campeonato de la Liga Profesional del Fútbol Boliviano paró durante 13 días. Las páginas deportivas en los periódicos eran prácticamente inexistentes durante esos días. La dirección de los medios de prensa escrita no contemplaba al deporte como una prioridad a la hora de informar a la gente.
La pregunta que nos tenemos que hacer todos los bolivianos es ¿Por qué es necesario parar el fútbol durante los conflictos políticos sociales? La principal razón es precautelar la vida de los protagonistas y de los espectadores. Además el fútbol supone normalidad dentro de un país.
El 31 de octubre del presente año, el Ex-Presidente, Evo Morales, hizo un pedido público para que el fútbol pueda volver. Evo afirmó que dos semanas sin fútbol era demasiado y en Bolivia ¨somos futboleros¨, por esa razón, entre otras, el paro cívico-ciudadano debía entrar en un cuarto intermedio. Esto no pasó, más de 20 días tuvieron que transcurrir para que se pudiera reinstalar el torneo tras la pacificación del país.