Está o en todo caso, estaba, terminantemente prohibido tocar la copa antes de jugar el partido. Esta era una ley primera del fútbol mundial no se puede ir en contra de ella, una de las cábalas universales, porque quien lo haga, terminará con lágrimas en los ojos lamentando desperdiciar una chance inmejorable por salir campeón. El que toque el trofeo será segundo y no hay nada que hacer, así lo dicen los manuales del fútbol.
La que fue una cábala y una maldición por años y años parece haber cambiado, en las dos finales de los torneos más importantes de clubes de Sudamérica hubo jugadores que tocaron la Copa al ingresar a la cancha y la ganaron.
El 9 de noviembre en el estadio General Pablo Rojas de Asunción también conocido como la Nueva Olla de Cerro Porteño se disputó la final única de la Copa Sudamericana entre los clubes Colón de Argentina e Independiente del Valle de Ecuador. Cuando los jugadores hicieron el ingreso protocolar a la cancha, el defensor Anthony Landazuri tocó la Copa, contra cualquier pronóstico cabalero, el club ecuatoriano ganó la final por 3 a 1.
Esta situación se repitió en Lima, en la final única de la Copa Libertadores de América donde Gabigol de filas del Flamengo tocó el trofeo de la Copa también en el ingreso al campo de juego. En este caso el jugador no solo fue campeón sino que marcó los dos goles con los que su club alzó el trofeo. Al finalizar el partido explicó porque lo hizo, “¿Por qué no iba a hacerlo? El de la salida al campo es un momento de inspiración. Un momento en el que siempre oro y realmente la toqué porque estaba en mi corazón conquistarla”, contó”.
Parece haber cambiado la cábala o haberse roto el maleficio, uno que persiguió a varios equipos incluso en Europa, como en la Champions League 2004/05 cuando la final la disputaron Milan y Liverpool en el Estadio Olímpico Atatürk de Estambul, Turquía. Gennaro Gattuso, volante del cuadro rossonero, tocó el trofeo también mientras ingresaban a la cancha, su equipo terminó el primer tiempo con una victoria 3-0, pero el Liverpool igualó el compromiso en seis minutos y después se impuso en los penales quedándose con la corona.