El 2020 fue un año atípico, la pelota tuvo que detenerse en el mundo entero debido a la pandemia, el fútbol tuvo un antes y un después al que aún nos vamos acostumbrando donde todavía se siente el vacío de los hinchas en los estadios.
En enero del pasado 2020 nacieron los Premios Cábala, el sueño de todo el equipo de la Revista Cábala que quiso darle al actor principal del fútbol boliviano la importancia y el reconocimiento que merece su trabajo, fue una gala presencial donde se premió en ocho categorías a distintos futbolistas que destacaron en la temporada 2019 y en el que participaron en la elección más de 21 mil personas que emitieron su voto en redes sociales.
Por toda la coyuntura era difícil tomar una decisión respecto a la temporada 2020, en Bolivia normalmente se disputan dos torneos al año donde participan catorce clubes, por la pandemia del COVID19 el campeonato apertura se paralizó en marzo y fue recién hasta la última semana de noviembre que el fútbol en Bolivia volvió a las canchas, se jugaron 98 partidos en 34 días.
En Bolivia la pandemia atraviesa la parte final de la segunda ola, comienzan a llegar las vacunas para la población y así como la pelota debe seguir rodando, los sueños y metas también. En ese sentido la segunda edición de los Premios Cábala se hizo realidad en el Hotel Tecno Boutique de la ciudad de La Paz, un evento virtual donde con todas las medidas de bioseguridad se hicieron presentes solamente los ganadores de las distintas categorías para recibir su reconocimiento.
En esta ocasión se contabilizaron 59.716 votos de parte de los hinchas que en redes sociales eligieron a los futbolistas de su preferencia, a esto se sumó la prensa especializada que certificada por el Círculo de Periodistas Deportivos determinó el 60% de la puntuación final.
Al igual que en la primera edición este año fue un trabajo conjunto con las principales empresas en Bolivia que una vez más decidieron apostar y apoyar a la Revista Cábala en el inicio de su quinto año. Estos premios refuerzan el compromiso y son la motivación para que año tras año se siga trabajando por el crecimiento del fútbol boliviano.